Hoy voy a ser optimista, dije.
Cuando pienso que camino solo,
escucho los acordes de esa música
que viene conmigo.
Si creo que nadie me entiende,
rememoro el viento que todos odian;
y que yo amo y poseo - sobre todo poseo -
cuando más lo necesito.
Las veces que noto que ninguno me desea,
releo a Capote:
"Si no nos admirase alguien,
nadie se tomaría la molestia en criticarnos".
Y si carezco de espacio,
cuando noto que no tengo cabida,
RESPIRO.
Miro a mi alrededor, al cielo.
Y dejo que mi mente luche ante la imposiblidad
de imaginar el infinito.
sábado, 23 de abril de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario